Por Phoebe So, publicado originalmente en The Center for Effective Philanthropy, 2 de julio de 2024
En el sector filantrópico, los intermediarios y patrocinadores fiscales desempeñan un papel vital. Son los eslabones fundamentales que conectan los recursos de donantes con causas históricamente olvidadas y comunidades marginadas. Reunir fondos comunes, proporcionar apoyo administrativo y absorber riesgos permite a los grupos de base centrarse en su misión principal y su impacto.
Recientemente, tuve el privilegio de asistir a la sesión del Festival de la Red de Financiadores de Derechos Humanos titulada "En la crisálida: Es Hora de Replantearse el Patrocinio Fiscal". Los ricos debates y las ideas compartidas por mis compañerxs asistentes me hicieron pensar en el patrocinio fiscal y los fondos intermediarios desde una nueva perspectiva: a través de la lente del análisis de la cadena de suministro.
Los intermediarios actúan como interfaz y amortiguador entre grandes financiadores institucionales y pequeñas beneficiarias, a menudo poco convencionales. Esta estructura ha desbloqueado importantes flujos de financiación para zonas que sufren una carencia crónica de fondos. Un informe de 2023 de Social Impacts Common y la Red Nacional de Patrocinadores Fiscales concluyó que los patrocinadores fiscales posibilitaron más de 2.600 millones de dólares en actividades benéficas que de otro modo no habrían tenido lugar.
At Fenomenal Funds, we’ve seen first-hand the power of this model. As a feminist funding collaborative, we act as an intermediary mechanism to channel resources to all 47 Prospera International Network of Women’s Fund members across various regions. By pooling contributions from our four funding partners and hosting them through a fiscal sponsor, we’re able to overcome restrictions on funding amounts, geographic focus, and thematic priorities that any individual donor would face. The result is a more flexible, responsive, and impactful funding vehicle for feminist movements.
Sin embargo, para que esta cadena de financiación sea realmente empoderadora en lugar de explotadora, existen dinámicas de poder y modelos mentales arraigados a los que debemos hacer frente. Con demasiada frecuencia, los requisitos de diligencia debida y las condiciones impuestas por financiadores suponen una carga desproporcionada para los actores de las fases posteriores. Los grupos de base pueden acabar dedicando demasiado tiempo a actividades de cara a financiadores, en lugar de al trabajo de cara a la comunidad, y los costes administrativos y de riesgo pueden desplazarse a quienes tienen menos capacidad para absorberlos.
Cambiar el Poder Asumiendo Riesgos y Generando Confianza
Como señaló astutamente unx de lxs asistentes a la sesión mencionada, muchos grandes donantes tienen una concepción demasiado estrecha de su tolerancia al riesgo. Con sus considerables balances, su sólida infraestructura organizativa y su gran influencia, están bien posicionados para asumir más incertidumbres en su financiamiento. Aceptar más riesgos les permitiría, o quizá deberíamos decir les daría poder, para relajar o eliminar restricciones innecesariamente onerosas, liberando a intermediarios para que sean más facilitadores y menos controladores.
En la práctica, esto podría implicar simplificar los requisitos de solicitud y presentación de informes, proporcionar financiación plurianual sin restricciones y confiar en que intermediarios tomen decisiones sobre las financiamiento basándose en su profundo conocimiento de las comunidades a las que sirven.
Otro aspecto importante para mí fue que la confianza debe fluir en todas las direcciones, no sólo de arriba abajo. La confianza es la base del éxito de cualquier relación y, en la cadena de recursos filantrópicos, permite a intermediarios apoyar y potenciar eficazmente a los grupos de base.
A la inversa, cuando quienes participan como intermediarios carecen crónicamente de fondos suficientes, la confianza puede resentirse en ambas direcciones. Unos recursos insuficientes limitan la capacidad de quienes son intermediarios para proporcionar un desarrollo de capacidades y un apoyo receptivo, lo que puede llevar a los grupos de base a percibirlos como guardianes o a sentir que su trabajo está siendo restringido. Al dar prioridad a la confianza mediante una financiación suficiente y una comunicación genuina, lxs financiadores, lxs intermediarixs y los grupos de base pueden establecer relaciones sólidas y transparentes que sienten las bases para una colaboración más impactante y transformadora.
Además, la actual dinámica de escasez de fondos procedentes de grandes donantes crea una competencia artificial y malsana entre los fondos intermediarios y las organizaciones establecidas del movimiento. En lugar de colaborar para hacer crecer el pastel general de los recursos para los movimientos por la justicia social, nos enfrentamos entre nosotrxs para conseguir porciones limitadas. Esta mentalidad de escasez resta energía a la co-creación generativa.
Mover el dinero de forma que transforme realmente las relaciones de poder exige que quienes financian se replanteen su papel en el ecosistema. No se trata sólo de la cantidad de fondos que se mueven, sino de la calidad de las relaciones y de la distribución equitativa de los riesgos. En una era de crisis múltiples -desde el cambio climático hasta el aumento de la desigualdad y el retroceso democrático- necesitamos modelos alternativos de financiación para el cambio social que sean más adaptables, resistentes y responsables ante las comunidades. Y necesitamos dotar de recursos a estos modelos.
Se Trata de Algo Más que de Mover Dinero: Dinámicas Cambiantes
En Fenomenal Funds, hemos aprendido que asumir y compartir el riesgo como entidad de financiación colaborativa, en lugar de descargarlo en los fondos intermediarios y las organizaciones beneficiarias del financiamiento, es una parte crucial de la ecuación de cambio de poder. Esto significa mantener conversaciones abiertas y sinceras con nuestras co-partes sobre los costes y riesgos de su trabajo, colaborar en el desarrollo de estrategias adecuadas de seguridad y mitigación de riesgos y asignar los recursos en consecuencia. Nos exige profundizar continuamente en nuestra comprensión de los contextos en los que operan nuestras co-partes e invertir en el desarrollo de nuestras capacidades para gestionar y compartir los riesgos de forma responsable.
Aplicar principios feministas [PS1] en nuestra forma de financiación exige el compromiso de proporcionar no sólo recursos financieros, sino también tiempo, atención y flexibilidad. Reconocemos que el cambio de poder es un proceso continuo que requiere que seamos adaptables y receptivxs a las necesidades cambiantes de nuestras co-partes, lo que a menudo significa dar un paso más para abogar internamente por acuerdos de financiación más flexibles y trabajar estrechamente con quien funge como patrocinador fiscal para agilizar los procesos administrativos y legales que pueden impedir el flujo oportuno de recursos.
Cuatro Próximos Pasos para Organizaciones Intermediarias
¿Qué podemos hacer, como intermediarias, para cambiar esta dinámica? En la sesión del Human Rights Funders Network Festival surgieron varias ideas concretas:
- Compartir activamente mejores prácticas y las lecciones aprendidas en el ámbito del patrocinio fiscal, por ejemplo, la Red Nacional de Patrocinadores Fiscales ha desarrollado directrices para patrocinadores fiscales e Ignita, una marca hermana de Women Win, ha consolidado recientemente cinco dimensiones feministas de la Filantropía Feminista. Reuniendo nuestros conocimientos, podemos elevar colectivamente el listón y evitar reinventar la rueda.
- Aumentar la transparencia sobre los costes reales del patrocinio fiscal. Muchxs donantes necesitan conocer el alcance total de nuestro trabajo. Compartir datos de referencia y desgloses de costes puede ayudar a educar a quienes financian y argumentar a favor de un apoyo operativo suficiente.
- Abordar el trabajo con una mentalidad de colaboración y abundancia en lugar de competencia y escasez. Podemos modelar el cambio que queremos ver asociándonos con otrxs intermediarixs, haciendo cálidas referencias y explorando oportunidades conjuntas de recaudación de fondos. Si podemos hacer crecer el pastel general, todxs saldremos beneficiadxs.
- Amplificar nuestra labor de incidencia comunicándonos con lxs donantes de forma concertada. Cuando diferentes patrocinadores e intermediarios fiscales transmiten un mensaje unificado sobre lo que necesitamos para tener éxito, es más probable lograrlo. Podemos aprovechar nuestro "poder intermedio" colectivo para lograr cambios sobre el terreno.
Cuatro Próximos Pasos para Donantes
Relatedly, and just as importantly, here are some key ways that large donors can be part of the solution:
- Amplíen su apetito por el riesgo y concedan más financiación sin restricciones. Reconozcan que invertir en movimientos sociales conlleva incertidumbres y que las organizaciones intermediarias están bien posicionadas para evaluar y gestionar esos riesgos.
- Financiar íntegramente el coste real del patrocinio fiscal y los servicios de intermediación. Garantizar la salud y resiliencia de quienes fungen como intermediarias beneficia a todo el ecosistema.
- Racionalicen los requisitos de elaboración de informes y sean receptivxs a formas alternativas de diligencia. Confíen en que sus co-partes intermediarias disponen de sólidos procesos de selección y supervisión; no dupliquen esa labor innecesariamente.
- Incentiven y recompensen la colaboración entre sus organizaciones beneficiarias intermediarias. Utilicen su influencia para crear condiciones de acción colectiva y aprendizaje, en lugar de recurrir a prácticas que alimenten la competencia. Consideren mecanismos de financiación conjunta, fondos comunes de financiación, que den más flexibilidad a las intermediarias.
Revolucionar estas cadenas de gestión de recursos consiste en restaurar la agencia y la autonomía de las comunidades. Como donantes e intermediarias, debemos utilizar nuestro poder relativo de forma responsable para generar confianza, absorber riesgos y ceder el control. Sólo entonces podremos desarrollar un ecosistema filantrópico que sea realmente vivificante para todxs.
Este artículo se publicó originalmente en The Center for Effective Philanthropy, 2 de julio de 2024