Fenomenal Funds es una colaborativa de financiadores feministas que utiliza un modelo de gobernanza compartida y financiamiento participativo para apoyar la capacidad de resiliencia de los fondos de mujeres miembros de la Red Internacional de Fondos de Mujeres Prospera.

2023-12-12

Rompiendo con las prácticas de aprendizaje y evaluación en la filantropía desde una perspectiva feminista

RESUMEN

Las fuerzas patriarcales, imperialistas y coloniales han intentado durante mucho tiempo deslegitimar las epistemologías del Sur global y elevar los modos occidentales de pensar, conocer y, por tanto, ser. En particular, dentro del discurso del desarrollo, los principios y la práctica de la corriente dominante de Monitoreo, Evaluación y Aprendizaje (conocida popularmente como MEL, por sus siglas en inglés) siguen legitimando estas formas de construcción, producción y difusión del conocimiento. La MEL tradicional se basa en el supuesto de que los beneficiarios deben "rendir cuentas" a los donantes y aportar "pruebas" para establecer la rentabilidad de los fondos a partir de indicadores y marcos lógicos predefinidos. Este enfoque de la MEL ha borrado de la historia del cambio social las voces de las niñas, las mujeres, los pueblos indígenas, las personas LGBTQI+ y otros, y ha desconectado a activistas, colectivos y movimientos de un profundo pozo de conocimientos y aprendizaje. Es necesaria una reimaginación colectiva de la MEL. Aunque se han propuesto una serie de enfoques y marcos alternativos, éstos permanecen en la periferia y la mayoría de lxs financiadores siguen exigiendo a los beneficiarios que cumplan múltiples requisitos de información para justificar su financiación. En este artículo, a través de una conversación colectiva, documentamos nuestro aprendizaje compartido. Mostramos tres casos diversos en los que nosotrxs, como profesionales feministas, y los movimientos a los que apoyamos intentamos desbaratar las estructuras, las herramientas y el lenguaje opresivos de la MEL, así como las prácticas de lxs financiadores, como profundos actos de resistencia.

Hace mucho tiempo que las fuerzas patriarcales, imperialistas y coloniales intentan dominar las epistemologías del hemisferio sur y dominar los modos occidentales de pensar, saber y, por tanto, de ser. En particular, en el marco del discurso sobre el desarrollo, los principios y la práctica de monitoreo, evaluación y aprendizaje (comúnmente denominados MEL, por sus siglas en inglés) dominantes siguen regulando estas formas de construcción, producción y difusión del conocimiento. Tradicionalmente, la MEL se basa en el supuesto de que quienes reciben financiamiento deben garantizar una "devolución de cuentas" a los administradores de fondos y proporcionar "datos probatorios" para establecer un buen informe de resultados/coste sobre la base de indicadores y cuadros lógicos predefinidos. Este enfoque de la MEL ha contribuido a eliminar la voz de las mujeres, las niñas, las poblaciones originarias, las personas LGBTQI+ y otras personas de la historia del cambio social y a desconectar a activistas, colectivos y movimientos de una gran reserva de conocimientos y enseñanzas. Es necesario replantearse la MEL de forma colectiva. Aunque se han propuesto numerosos enfoques y marcos alternativos, éstos siguen estando en suspenso, y la mayoría de lxs donantes de fondos siguen exigiendo a lxs beneficiarios que satisfagan sus requisitos reglamentarios en materia de elaboración de informes para justificar su financiación. En este artículo, gracias a una conversación colectiva, documentamos lo que hemos aprendido juntxs. Presentamos tres casos diversos en los que nosotrxs, feministas practicantes, y los movimientos que apoyamos intentamos perturbar las estructuras, las herramientas y el lenguaje en materia de MEL, así como las prácticas de donantes, en tanto que actos de resistencia profunda.

Durante mucho tiempo las fuerzas patriarcales, imperialistas y coloniales han intentado deslegitimar las epistemologías del Sur global y enaltecer los modos occidentales de pensar, conocer y, por tanto, ser. En particular, dentro del discurso del desarrollo, los principios y la práctica de la corriente dominante de Monitoreo, Evaluación y Aprendizaje (conocida popularmente como MEL, por sus siglas en inglés), siguen refrendando estas formas de construcción, producción y difusión del conocimiento. La MEL tradicional se basa en el supuesto de que, considerando indicadores y marcos lógicos predefinidos, las organizaciones beneficiarias deben "rendir cuentas" y proporcionar "pruebas" a lxs donantes para determinar la rentabilidad de los fondos. El enfoque inherente a MEL ha provocado, en parte, que las voces de niñas, mujeres, comunidades indígenas, personas LGBTQI+ y otros grupos desaparezcan de la historia del cambio social y que, en consecuencia, activistas, colectivos y movimientos se desconecten de un profundo corpus de conocimientos y aprendizaje. Por ello, es necesario que la MEL se replantee colectivamente. Aunque se han propuesto una serie de enfoques y marcos alternativos, éstos permanecen en la periferia, ya que la mayoría de lxs financiadores siguen exigiendo a las co-partes el cumplimiento de múltiples requisitos regimentales de información para justificar su financiación. En este artículo, a través de una conversación colectiva, documentamos nuestro aprendizaje compartido. Damos cuenta de tres casos diversos en los que nosotrxs, en tanto profesionales feministas, y los movimientos que apoyamos, estamos intentando, a manera de actos profundos de resistencia, desbaratar las estructuras, las herramientas y el lenguaje opresivos de la MEL, como también las prácticas tradicionales de lxs financiadores.

Ir al contenido